Hoy en día cuando el comercio electrónico cada vez es más actual y más utilizado por los usuarios, es muy importante de proteger nuestros datos de un posible fraude y realizar los pagos online seguros. En el siguiente enlace de la Oficina de Seguridad de Internauta puede consultar información más detallada sobre el tema.
Escoger un comercio seguro
Antes de nada, nos tenemos que fijar dónde nos conectamos para evitar posible caso de conexión a una web que no es propiamente dicha.
Tenemos que observar que la web donde vamos a poner nuestros datos de pago disponga de algunas medidas de seguridad. Es seguro si se garantiza que la información que vamos a poner se transmite protegida. La página web tiene que empezar por: https://, y la barra de direcciones debe mostrar un candado.
Escoger el método de pago
Existen diferentes tipos de pago existentes. Debemos escoger siempre el adecuado a tipo de tienda online, confianza existente, etc.
- Tarjeta de débito o crédito. El uso de tarjetas suele ser rápido, cómodo y seguro. Sin embargo, no es una forma segura si dudamos de fiabilidad de la página web. Para evitar problemas, muchas tiendas o servicios online usan TPV, donde la propia entidad bancaria verifica los datos de la tarjeta. Este sistema es utilizado por Visa y MasterCard.
- Transferencia bancaria. La ventaja es que no se introducen los datos en ningún sitio web pero la desventaja es que puede ser difícil recuperar el dinero si se realizan transferencias internacionales en el caso de un fraude.
- Plataforma de pago. La más usual es PayPal. La tiendas o servicios online no tienen acceso a nuestros datos de pago y la transacción se realiza a través de un mediador. Tendríamos que verificar las medidas de seguridad de este mediador.
- Transferencia instantánea. Los servicios más utilizados son Western Unión o MoneyGram. Son útiles y rápidos en los casos de envío de dinero a personas conocidas. La desventaja que el reembolso no es posible. Además se realizan de forma anónima, lo que imposibilita identificar el destinatario en caso de fraude. No es aconsejable para compras online.
- El pago contra reembolso. La ventaja es que no se paga hasta que se verifique el material. Pero muchos vendedores no lo aceptan, y además puede generar costes adicionales.
- Las tarjetas prepago. Son cómodas porque no están asociadas a ninguna cuenta bancaria. La ventaja es que en el caso de pérdida o robo, sólo perderíamos la cantidad que hay en este momento.
- Teléfono móvil. El sistema no está muy extendida en España. Hay que enlazar la tarjeta con el dispositivo, por lo tanto, en el caso de la pérdida del terminal, tendrían acceso a nuestros datos de la tarjeta.
Pidan presupuesto sin compromiso de implantación de la normativa vigente