La aplicación de políticas de protección de datos, la soberanía y la protección de datos desde el diseño y por defecto significan el empleo de herramientas de gestión y técnicas que garantizan el cumplimiento de RGPD. Estas técnicas deben tenerse en cuenta desde las primeras etapas del diseño de un Espacio de Datos.
La economía basada en datos
La economía basada en datos va más allá de los límites de los titulares de datos. Su objetivo es crear un mercado de intercambio de acceso a datos con diferentes partes interesadas, tales como:
- organismos públicos,
- compañías,
- investigadores,
- personas físicas,
- etc.
Soberanía de datos
La soberanía de datos es ese control y la confianza que las partes interesadas necesitan en la economía de acceso a datos. La soberanía sobre los activos de datos de las empresas, los investigadores, los Estados y las personas físicas es la forma de generar la confianza que permitirá que la economía digital se desarrolle en todo el mercado interior, según el Considerando 7 del RGPD.
Cómo se consigue la soberanía de datos
La forma de conseguir una «soberanía de datos» efectiva se consigue implementando una infraestructura abierta y federada. Debe estar basada en la gobernanza, políticas, reglas y estándares, que genera confianza en todos los grupos de interés. Se realiza mediante un control efectivo de sus activos de datos mediante herramientas de gestión. Esto es lo que se denomina Espacio de Datos.
Un único modelo de gobernanza
Debe haber un único modelo de gobernanza en un Espacio de Datos. No es posible implementar una política de protección de datos siendo una capa separada. La integración de herramientas de privacidad debe realizarse desde el diseño de los Espacios de Datos.
De esta manera, pueden ser herramientas de doble uso que facilitan la implementación de la soberanía de los datos. De lo contrario, el resultado sería un Espacio de Datos ineficiente e ineficaz, si un Espacio de Datos se construyera apilando herramientas, sobre la marcha, con diferentes propósitos, y sin planificar.
Para más información, lean el siguiente artículo de la AEPD.
