La huella dactilar se está convirtiendo en un medio alternativo a las tarjetas o los códigos numéricos a la hora de controlar el acceso al puesto de trabajo. Su gran ventaja es que impide que un trabajador fiche por otros. Sin embargo, su implantación y uso debe seguir una serie de pasos y cumplir ciertos requisitos para su correcta adecuación a la legislación sobre protección de datos.
No hace falta consentimiento
Aunque como norma general el tratamiento de los datos de carácter personal requiere el consentimiento inequívoco del afectado, la previa existencia de una relación contractual es una de las excepciones a esta obligación.
Información a los trabajadores
Antes de iniciar el proceso de toma de las huellas dactilares y la instalación en sí del sistema de control basado en ellas, hay que cumplir con el principio de información. Los interesados (en este caso, los trabajadores) deberán ser previamente informados de modo expreso, preciso e inequívoco.
Hay que hacerlo con todos los trabajadores, ya sea por una circular pública o una comunicación a cada uno de ellos. No es suficiente informar al comité de empresa solamente.
Nivel de seguridad
En principio, los datos personales identificativos como es la huella dactilar sólo requieren nivel de seguridad básico. Pero en la medida en que las entradas y salidas de los empleados quedan registradas y pueden permitir analizar aspectos de su comportamiento (como su puntualidad, sus ausencias, etc.), podría ser aconsejable establecer también medidas de seguridad de nivel medio.
Principio de calidad de datos
La finalidad perseguida (control de horario de trabajo) es plenamente legítima y, además, la implantación de la identificación por datos biométricos es una medida de superior eficacia respecto a otros sistemas. Por lo tanto, es una medida adecuada, pertinente y no excesiva, según el principio de calidad de datos.
Lo único que su empresa debe tener en cuenta que de producirse la pérdida de estos datos biométricos o el acceso no autorizado, sería como darle la llave de la empresa a un extraño. Por lo tanto, podría ser aconsejable aplicar determinadas medidas para evitar la pérdida accidental de estos datos.
Pidan presupuesto sin compromiso de implantación de la normativa vigente
