Firmar el contrato de confidencialidad es habitual en la relación entre empresas o profesionales. Por lo general, el contrato contiene la información que se considera confidencial y las condiciones, al igual que la duración del mismo. Y si una de las partes quiere anular este contrato. En este artículo explicaremos cómo anular un contrato de confidencialidad.
Las circunstancias para anular el contrato de confidencialidad
Así, esas circunstancias serían las siguientes:
- La causa que motiva la nulidad del está contemplada en las cláusulas del mismo.
- Una de las partes haya vulnerado las condiciones estipuladas en el contrato.
- No se ha recibido la información confidencial objeto del contrato.
- Una o más partes del contrato deseen añadir o modificar alguna o varias cláusulas o condiciones del contrato. Eso daría lugar a un nuevo contrato de confidencialidad.
Cómo anular el contrato
Si el dicho contrato contiene una cláusula respecto a la anulación del mismo, hay que notificar a la otra parte la intención de anular el contrato. Luego se debe seguir el procedimiento contemplado en el mismo. Por lo consiguiente, es recomendable incluir cláusulas que se especifiquen no solo las condiciones que pueden producir una anulación del contrato, sino también el procedimiento para ejercer este derecho.
Si me niego a firmar el contrato de confidencialidad
Si me niego a firmar un contrato de confidencialidad, la consecuencia sería no llevar a cabo la relación contractual que se tenía pensado hacer.
El contrato de confidencialidad es un seguro para la empresa que cede información confidencial. Es la forma de evitar que esa información pueda ser usada por terceros en su perjuicio. Por lo tanto, si el socio con el que tenía pensado trabajar se niega a firmar un contrato de confidencialidad, no debería llevar a cabo con él dicho trabajo.
Y si la cláusula es abusiva…
Sin embargo, se podría anular si la cláusula o acuerdo de confidencialidad en el contrato laboral es abusiva o presenta algún vicio.
