La desinformación es compartir información falsa con una intención maliciosa. El objetivo es hacer daño a la confianza pública y manipular la realidad para obtener algún tipo de ventaja política, económica o personal. En este artículo se presentarán herramientas para combatir esta problemática que nos ayudará a estar mejor protegidos.
¿Qué es desinformación?
La desinformación es un problema actual debido a la exposición a las redes sociales, mensajería instantánea y en definitiva Internet. Debido a la capacidad de difusión que este medio ofrece, haciendo que la información viaje a cualquier parte del mundo. Además, debemos tener en cuenta que cualquier usuario puede publicar una determinada información sin necesidad de que esta esté contrastada, sea veraz y rigurosa.
Riesgos de desinformación
- Toma de decisiones erróneas.
- Disminución de la confianza en las instituciones y las fuentes de información confiables.
- Odio y discriminación.
- División y segmentación.
- Etc.
Fast-check plataformas
Además, en España hay varias plataformas de fact-check (plataformas de verificación de datos):
- Maldito Bulo: es un medio que verifica las informaciones que circulan en Internet, sobre todo en Facebook o Twitter, plataformas como YouTube, memes y cadenas de mensajes en WhatsApp. Ayuda a los usuarios a contrastar la información y a identificar noticias falsas.
- Newtral: es un medio cuya finalidad es informar a los ciudadanos y verificar bulos que circulan por las redes sociales. Sobre todo en Twitter, TikTok, Instagram y Facebook y YouTube.
- Salud sin bulos: iniciativa de la agencia de comunicación COM SALUD en colaboración con la Asociación de Investigadores en eSalud (AIES). Tiene como objetivo combatir las noticias falsas sobre salud en Internet y las diferentes redes sociales para facilitar que la información accesible sea real y fiable.
Como sabemos, la desinformación es un problema real que nos puede afectar a todos. Los ciberdelincuentes no se enfocan sólo en las vulnerabilidades de sistemas, máquinas, infraestructuras o aplicaciones, sino también en las nuestras como usuarios de Internet. Por consiguiente, tenemos la necesidad de potenciar ciertas capacidades para impedir que caigamos en la desinformación y facilitar que la desinformación no llegue a nuestros hogares. Para ello, debemos contar con herramientas que nos ayuden a diferenciar las noticias falsas de las verdaderas.
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