Una empresa de hoy en día debe conocer los riesgos de que se produzcan incidentes de ciberseguridad que puedan afectar a la continuidad del negocio. Conocerlos sirve para valorar los efectos a corto y medio plazo ante amenazas reales, como verse afectado por un ransomware o una fuga de información, sufrir una intrusión y otros similares a estas historias reales. Tendrás distintas opciones: aceptarlos, evitarlos, mitigarlos o transferirlos. Una forma particular de transferirlos es contratar un ciberseguro.
Prepararse para hacer frente a un incidente
Para empezar, hay que realizar un estudio de las amenazas que pueden afectar a la empresa, es decir, iniciar un análisis de los riesgos. Se puede utilizar herramientas de autodiagnóstico para:
- revisar de forma sencilla y guiada cuáles son tus activos de información,
- determinar a qué amenazas estás expuesto,
- evaluar por dónde debes empezar a cuidar de la ciberseguridad de tu negocio.
Gestionar riesgo
A la vista de los resultados, la empresa puede decidirse a realizar las siguientes acciones para contrarrestar los efectos de cada posible riesgo:
- Aceptar el riesgo: Es la más práctica si los riesgos son de bajo impacto y baja probabilidad. Por ejemplo, ante el riesgo de perder un pendrive con datos no críticos, lo menos costoso es comprar uno nuevo.
- Evitar o eliminar el riesgo: esta alternativa es la opuesta, para riesgos muy preocupantes. Básicamente consiste en cambiar nuestro proceso para esquivar ese riesgo, dejando de utilizar el sistema o elemento que está amenazado.
- Reducirlo o mitigarlo: se trata de implantar medidas técnicas y organizativas que ayuden a hacer desaparecer este riesgo, o por lo menos, minimizar sus efectos.
- Transferir el riesgo: esta alternativa sirve en aquellas situaciones en las que el impacto es muy alto, aunque su probabilidad sea media o baja. Son riesgos excepcionales.
Transferencia de riesgos y ciberseguro
En aquellos riesgos en los que la empresa tenga que destinar una cantidad elevada de recursos para mitigar los efectos perniciosos del posible incidente, es conveniente estudiar la opción de la transferencia del riesgo a un tercero, que puede ser un partner tecnológico, un departamento de la empresa o una compañía aseguradora.
Consulten un interesante artículo de Incibe sobre este tema que pueden ver en el siguiente enlace.