El trabajador es un interesado en sus datos personales, pero además es la persona que puede intervenir de manera directa en el tratamiento de datos de otros. Por lo tanto, es muy importante que esté concienciado con la protección de datos.
Garantía de confidencialidad
Según el RGPD art. 5.1.f), al sentar los principios relativos al tratamiento, los datos personales serán «tratados de tal manera que se garantice una seguridad adecuada de los datos personales, incluida la protección contra el tratamiento no autorizado o ilícito y contra su pérdida, destrucción o daño accidental, mediante la aplicación de maneras técnicas u organizativas apropiadas»(integridad y confidencialidad).
Según el RGPD art. 32.4, «el responsable y el encargados del tratamiento tomarán medidas para garantizar que cualquier persona que actúe bajo la autoridad del responsable o del encargado tenga acceso a datos personales solo pueda tratar dichos datos siguiendo instrucciones del responsable, salvo que esté obligada a ello en virtud del Derecho de la Unión o de los Estados miembros».
La LOPD art. 5.1 dice que «todas las personas que intervengan en cualquier fase de éste estarán sujetas al deber de confidencialidad al que se refiere el art. 5.1.f) del Reglamento (UE) 2016/679».
El art. 5.3 añade: «las obligaciones establecidas en los apartados anteriores se mantendrán aun cuando hubiese finalizado la relación del obligado con el responsable o encargado del tratamiento».
Instrucciones del empleador
Por lo tanto, los trabajadores que participen en el tratamiento de datos personales tienen el deber de actuar siguiendo las instrucciones del empleador, que es el responsable de los datos. El trabajador debe velar por la seguridad de los datos de carácter personal en cuyo tratamiento participe, además del seguimiento de las concretas instrucciones del empleador.
Infracciones
Las conductas contrarias al «deber de protección de datos personales» pueden ser consideradas constitutivas de infracciones muy graves por la jurisprudencia, justificativas del despido.
Pidan presupuesto sin compromiso de implantación de la normativa vigente